Metodologías como el Systematic Inventive Thinking (SIT), el Design Thinking entre otras, nos hacen pensar que la innovación en una organización es una cuestión de solamente “generar” ideas. Sin embargo, una cultura de innovación en una organización requiere mucho más, y una buena idea, es solo un primer paso para este proceso.
El punto de partida es reconocer que para una organización normalmente la operación (Performance Engine según el libro citado) es la que tiene más poder. Y existen incompatibilidades fundamentales entre la operación del día a día y la innovación. Mientras que el Performance Engine busca eficiencia al hacer de cada tarea, actividad un proceso repetible y predecible, la innovación por su naturaleza no es rutinaria y es incierta. Un líder de innovación debe por tanto pensar como organizar el equipo y como planear, con un rigoroso proceso de aprendizaje transversal.
Cuando una compañía generaba nuevas ideas para expandir más allá su linea de productos, solicitó a sus empleados, particularmente al equipo de ventas, quien se encontraba más cerca del cliente apoyo para este proceso. Durante este reto, se generaron cerca de mil ideas, sumadas a otras centenares generadas por otras áreas de la organización.
La revisión de esa gran cantidad de propuestas, fue, de por si, un gran reto. Al final, la compañía decidió que sólo tenía los recursos para continuar adelante solo 5 de ellas.
La verdad fundamental de la innovación: si bien es cierto que no se puede iniciar sin una idea, la importancia de la cacería de la “gran idea” está sobre valorada. [el gran valor está en] el otro lado de la innovación, [en] la ejecución. Vijay Govindarajan & Chris Trimble Autores del libro The Other side of Innovation. Solving the execution Challenge
Conclusión: La afirmación la innovación se trata de ideas es un mito y por tanto la organización debe colocar más atención al proceso de ejecución como tal para poder volver una iniciativa de innovación una realidad.
Algunas de estas iniciativas de innovación buscan llevar a la compañía a un objetivo más grande. Por ejemplo:
- Dow Jones: La ambición del CEO Rich Zannino fue ofrecer a sus clientes, lectores y anunciantes lo mejor de ambos mundos –un solo paquete, integrado de manera inteligente, con contenido entre los canales impresos y en linea. Para llegar allá, el generó varias iniciativas para revisar cada función core de negocio integrando procesos impresos y en linea.
- En Infosys, el CEO Narayana Murhy’s tenia la ambición de ensamblar un completo rango de servicios de tecnología de información para las empresas de tal manera que los clientes pudieran elegir un único proveedor responsable por diseñar, construir y correr los sistemas de información.
- En Thomson: la ambición de Brian Halls era servir a las firmas de abogados no solo con herramientas para investigación de casos jurídicos sino para todas sus necesidades de información.